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Cómo viajar sola siendo mujer

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Bueno, ¿cómo se hace una tarta de zanahoria? 

Huevos, zanahorias... Ojalá viajar sola como mujer fuera tan sencillo como una buena receta. 

No existe una lista predeterminada de ingredientes, porque el viaje en solitario ideal depende totalmente de ti. 

Sin embargo, puedo responder a tus preguntas para aligerar la carga de tus (innumerables) preocupaciones. 

Espero que al final de este artículo tengas ganas de convertirte en una viajera en solitario.

Esto es lo que encontrará en este artículo: 
I - ¿Es peligroso viajar sola?
II - Tengo miedo a lo desconocido, no sé qué esperar.
III - Tengo miedo de no ser muy ingeniosa y de depender demasiado de los demás.
IV - Las opiniones de los demás me desaniman.
V - ¿Y si...?

1. Viajar sola siendo mujer, quiero pero... Es peligroso, ¿no?

Esta frase la hemos escuchado alguna vez de nuestros seres queridos, o incluso de nosotras mismas, pero como decía mi padre:

"La vida en sí misma es peligrosa, pero eso no es razón para dejar de respirar".

El riesgo no era una razón para renunciar, solo hay que organizarse y tener un punto de partida. Yo misma seguí algunos consejos antes de lanzarme.

  • Un paso a la vez

Aquí va mi primer consejo: Comienza poco a poco, para que vayas adquiriendo confianza por etapas. Viajar sola no significa necesariamente irse al otro lado del mundo durante seis meses (aunque haya un destino ideal para viajar sola, según tu perfil): puedes decidir quedarte en la ciudad vecina un fin de semana. 

Esto te permitirá dar un primer paso, meterte en el agua y aprender poco a poco a nadar sin lanzarte directo al océano.

  • Dormir en casa de una anfitriona de confianza 

Otra forma de minimizar los riesgos, es compartir la vida cotidiana de una persona local que conoce tu destino, las zonas que hay que evitar y las cosas que no hay que hacer.

¿Qué mejor que dormir en casa de un lugareño, para beneficiarte de un techo familiar y una sensación de seguridad?
Hay diferentes formas de encontrar familias dispuestas a recibirte: cada una tiene su forma preferida de hacer couchsurfing.

Entre ellas, SisterHome propone poner en contacto a las viajeras en solitario con una anfitriona local dispuesta a acogerlas gratuitamente. 
Una iniciativa segura para compartir un hogar cálido. 

  • Planificar un calendario 

¡Ojo, te aconsejo determinar tu perfil como viajera para saber si este consejo te conviene!

Puedes decidir organizarlo todo con antelación para limitar al máximo los imprevistos. 

Tener un calendario estricto y ordenado ayuda a evitar contratiempos, encuentros fortuitos y cambios de última hora: no hay lugar para la improvisación. 

Para algunas, es realmente tranquilizador contar con este marco predefinido que estructura el viaje y garantiza un itinerario sin problemas. No hay peligros: si sigues el tren, tienes pocas posibilidades de descarrilar.

Viajar sola como mujer presenta, pues, varios peligros, eso es un hecho. Pero esta es tu oportunidad de demostrar que el mundo no es tan amenazador como nos dicen y que las mujeres pueden viajar con orgullo y sin miedo. 

¿Por qué no ofrecer un hogar acogedor a una de estas super viajeras?

Tú también puedes participar en la liberación de las mujeres.


2. Tengo miedo a lo desconocido, después de todo, no sé qué esperar…


¿Sabías qué esperar antes de casarte, antes de mudarte o antes de cambiar de empresa?

No sé cómo ha sido tu vida, pero sin embargo, sé que al menos una vez te has enfrentado a una situación nueva para la que no estabas preparada. 
Esos imprevistos del día a día, los altibajos de la vida que te caen encima de forma inesperada y que debes aprender a gestionar...

Lo que trato de hacerte entender con esto es que no estar preparada no es insuperable.

De hecho, hay 6 imprevistos comunes que puedes anticipar fácilmente cuando salgas a recorrer el mundo.

Pero eso no es todo, durante mis preparativos, una amiga me dio dos preciosos consejos que deseo compartir contigo. 

  • Leer guías de viaje

Tienes a tu disposición muchas guías muy completas para presentarte el destino, lo que hay que ver, hacer, degustar... 
Lonely Planet, la Guide du Routard, la Guía Michelin, estos libros de viajes son muy completos y te permiten afrontar tu futuro viaje incluso antes de empezar. 

Una gran manera de conocer lo desconocido, de detallarlo y de hacerlo poco a poco familiar.

  • Blogs y vlogs, amigos de la organización

En la era de Internet, es aún más fácil tener información sobre tu destino.

Abundan las publicaciones en los blogs, a veces incluso con historias de viajes de amigas que han dado un giro sorprendente... Viajar sola o con amigas es totalmente diferente.

Los vlogs son vídeos de presentación de diferentes viajes, y también permiten una primera inmersión en el destino elegido. 

Son un gran recurso para visualizar el viaje que tenemos por delante. 

No podrás decir que no sabes qué esperar... 

3. Tengo miedo de no ser muy ingeniosa y de depender demasiado de los demás


Este es un temor que muchas compartimos. 

De hecho, yo también lo pensaba. Pero te diré algo: si puedes pensar por ti misma, al final no necesitas a nadie. 
Eso es lo que me han enseñado mis viajes.

  • ¿Son los demás realmente imprescindibles?

¿Por qué necesitas a otros para viajar sola? 
Cuando uno se plantea viajar, incluso como mujer sola, se da cuenta de que en realidad las actividades diarias no son nada extraordinarias en comparación con su rutina personal. 
También se trata de subir al autobús correcto por la mañana, bajarse en la parada correcta, tomar la calle correcta. 

Viajar es, de hecho, tan sencillo como la rutina diaria: lo que lo hace extraordinario es lo que se hace durante él.
Conocer a los lugareños, explorar callejones desconocidos como una aventurera, degustar sabrosas especialidades locales (y a veces encontrarse con sorpresas gustativas menos agradables, como las tortillas de ostras taiwanesas)...

Pero tampoco necesitas a nadie para hacer todo esto. Si aún no estás convencida, ¿por qué no consultas cuál sería tu compañero de viaje ideal?

  • Apóyate en los lugareños

Vayas donde vayas, nunca estarás completamente sola, incluso cuando viajes en solitario. Los lugareños, los restauradores y los artesanos también están allí, y sin duda puedes contar con su ayuda si la necesitas. 

Recuerdo mi viaje a Vietnam en el que me enfermé lo suficiente como para tener un pequeño ataque de hipoglucemia en medio de la calle. 
Estaba con mi familia, pero aunque estaba bien acompañada, una joven vietnamita se acercó corriendo a preguntarme cómo estaba y si necesitaba su ayuda. 

Todo salió bien: me comí una rebanada de piña deliciosamente dulce y volví a estar en pie. Estoy segura de que tú también estarás bien. 

Puede que no tengas piña fresca a mano (o tortillas de ostras, ¡qué pena!), pero al menos tendrás a una persona dispuesta a ayudarte si lo necesitas. 

A menudo hacemos demasiado hincapié en los peligros que representan ciertos individuos, pero nos olvidamos de recordar que la mayoría de las personas son profundamente solidarias. 

Viajando sola, puedes conocer a gente estupenda por el camino: aunque no tengas muchos recursos, encontrarás una mano amiga.

  • El ingenio puede aprenderse

Por último, ser independiente es una cualidad que se puede aprender. 

Puedes desafiarte en el día a día para aprender a arreglártelas por ti misma. 

Por ejemplo, puedes planear una excursión de un día a una ciudad que no conozcas: desarrollarás reflejos útiles para tus futuros viajes en solitario.

Viajar sola como mujer es, en definitiva, demostrar que eres capaz de todo sin nadie. 


4. Las opiniones de los demás me desaniman


El infierno son los demás, ¿no?

Es posible que tu familia, tus amigos y tus colegas se muestren inquietos de que viaje sola. 

¿Te has dado cuenta de que, por el contrario, estas aprensiones afectan menos a un viajero en solitario? 

Cuando un hombre decide viajar solo, se le anima, pero cuando hablas de tu deseo de convertirte en viajera en solitario, existen mucho más reparos.

Por supuesto, ya hemos hablado de esto: como mujeres, corremos un poco más de riesgo. 
Pero mientras estés decidida, quieras ir y te sientas preparada, no hay razón para que las opiniones de los demás sean un obstáculo fundamental. 

Al contrario: demuestrales  que se equivocan y que todos somos capaces de hacerlo. Y eso comienza con un simple paso.

  • Habla con tu círculo más cercano

Tranquiliza a los que te rodean.
Cuéntales el motivo por el que quieres viajar sola.
Demuéstrales que lo has pensado bien, que ya has planificado parte de tu viaje, que eres consciente de los riesgos. 
Seguramente no les convencerás en unas pocas frases, pero presentar un proyecto ya construido te permite hacer realidad tu sueño y mostrar tu motivación. 

No, no es una locura: eres perfectamente consciente y sabes lo que supone viajar sola como mujer. 

  • Proponles ayudarte

Para tranquilizarlos aún más, también puedes pedirles ayuda para construir tu itinerario con ellos. 

Pueden ayudarte a encontrar un alojamiento, una actividad que realizar, un buen restaurante que probar... Así, se asegurarán de que todo esté perfectamente pensado por tu parte, e incluso jugarán a diseñar el mejor viaje posible para ti. 

El miedo de los familiares es a menudo dejarnos partir hacia lo desconocido; si ven que no es tan incierto, pueden soltar más fácilmente su ansiedad.

Durante tu viaje, también puedes considerar la posibilidad de enviar algunas fotos a tu familia. Puede que sigan preocupados porque estés sola, pero les reconfortará el hecho de que seas feliz. 

Al fin y al cabo, les estás enviando una prueba de que te lo estás pasando muy bien a pesar de sus críticas. 

A fin de cuentas, estamos expuestas a los juicios de los demás todo el tiempo, pero somos nosotras las que tenemos que tomar la decisión final. 

¿Cuál será la suya?


5. ¿Y si...?

... ¿Todo fuese posible?

¡Vaya problema!

Hablando más en serio, estoy segura de que a estas alturas de tu lectura te están surgiendo muchas otras preguntas: "Pero si me pasa esto, si tengo que lidiar con aquello...". Y eso es perfectamente normal.
No conozco a ninguna viajera en solitario que no haya tenido miedo antes de empezar.

Viajar sola, especialmente si eres una mujer, es una aventura muy emocionante, sobre todo si se trata de tu primer viaje en solitario; por aquí encontrarás consejos prácticos para organizar tu primer viaje en solitario.

Te haré una pregunta a su vez: ¿qué pasaría si tú misma arruinaras tu viaje?

Cuando imaginamos una montaña, es cuando nos da miedo subirla. 

En su lugar, piensa que son unas vacaciones agradables, a tu alcance, que te traerán grandes recuerdos. 

Una vez más, no descarto los riesgos de viajar sola como mujer. 
Soy muy consciente de que los riesgos aumentan para nosotras y de que nuestras preguntas, temores y dudas son perfectamente legítimas. 

Pero es superando el miedo al riesgo cómo conseguirás los mejores recuerdos de tu vida. 

¿Está preparada para viajar sola?


Traducido del francés por Leydis Durango Elles

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